por Aldo Hugo Olguín
Prof. de Matemática, Física y Cosmografía
A medida que la tierra se mueve en torno del Sol, la iluminación en la superficie de nuestro planeta va cambiando a lo largo del año, y se produce el fenómeno de las estaciones con sus características propias. El 21 de Marzo comienza un nuevo otoño en nuestro hemisferio y una nueva primavera en el hemisferio, norte. Ese día, los rayos del sol caen verticalmente sobre el ecuador terrestre, e iluminan por igual ambos hemisferios del planeta. Habrá 12 hs. de oscuridad y 12 hs. de claridad en cualquier lugar de la Tierra.
Pero, ¿sólo luz nos llega del Sol? Desde que Galileo,
hace más de 400 años, advirtió que la cara visible del Sol no era tan inmaculada como se pensaba, sino que de tanto en tanto presentaba manchas oscuras que podían verse a simple vista cuando el Sol estaba cerca del horizonte, el hombre no ha dejado de investigar a esta estrella y su influencia en el medio interplanetario. Hoy se habla de CLIMA ESPACIAL para señalar al conjunto de fenómenos e interacciones que se desarrollan en el medio interplanetario, regulado principalmente por la actividad que se origina en el Sol y que afecta tanto a satélites artificiales como a los planetas.
Las tormentas geomagnéticas que se producen como consecuencia de la actividad solar también ejercen su influencia en las diferentes formas de vida. En la Foto 1 (del eclipse total de Sol) vemos que la Luna (el disco negro) tapa el disco Solar, desde donde proviene la luz que recibimos del Sol (la fotosfera solar), y así queda al descubierto la capa más externa (la corona solar) de forma irregular. Es de allí de donde proviene la radiación de alta energía, como así también las gigantescas ráfagas de plasma caliente que son aceleradas por la presión de la radiación solar hacia al espacio interplanetario. Estas eyecciones de masa coronal Foto 2, podrían en algún momento alcanzar la Tierra y penetrar su campo magnético, lo cual produciría corrientes de alta intensidad en las líneas de alta tensión, y las dejaría inutilizadas en pocos segundos, con las consecuencias que son de imaginar en esta sociedad altamente tecnificada.
En 1859 una tormenta de este tipo puso fuera de servicio las líneas del telégrafo recientemente inaugurado.
Actualmente las sondas gemelas STEREO de la NASA Foto 3, están fotografiando el Sol en tres dimensiones y monitoreando la turbulenta actividad en su superficie, a fin de predecir el estado del tiempo en el espacio, y registrar tormentas que se dirijan a los planetas.
Nuestra pregunta: ¿Podrá el hombre en un futuro no lejano aprovechar esta gigantesca energía, en beneficio de la humanidad? Este será, seguramente, el gran desafío para quienes habitamos el Planeta Tierra.
¡A disfrutar del otoño como en primavera!
FOTO 2: Eyecciones de masa coronal
FOTO 3: Sondas gemelas STEREO
