Las noches de noviembre, que aun conservan la frescura primaveral, son propicias para la contemplación del cielo. Al movernos por el espacio en nuestro planeta, tenemos la oportunidad de disfrutar del aspecto cambiante del cielo durante todo el año.
En esta época estamos pasando frente a las constelaciones de Aries, Tauro y Géminis; y objetos como la gigante estrella roja Aldebarán, de Tauro; el cúmulo de estrellas Las Siete Cabritas o Pléyades o las gemelas Pólux y Castor en Géminis, de brillo semejante, llaman la atención cuando miramos al norte; mientras por el sur lo hacen La Cruz del Sur, las Nubes de Magallanes, Alfa Centauro, Fomalhaut, Achernar y Canópus, entre otros.
La Tierra, en su constante rodar por el espacio, encuentra materia dispersa como restos de cometas, que al ingresar a la atmósfera terrestre, dan origen a las lluvias meteóricas.
Del 18 al 20 de noviembre las Leónidas serán un lindo espectáculo visual, pasada la medianoche en lo alto del cielo; y lo mismo ocurrirá en las madrugadas del 14 al 17 de diciembre, en que las Gemínidas darán un bello espectáculo de brillo y color que no olvidará fácilmente.
Diciembre del 2009, se despide con dos Lunas llenas, una el primer día y la otra el último día del mes y también del año.
Felices Fiestas de Navidad y Año Nuevo!!!
